Seguro que más de una vez te has dicho algo como: “Cuando vea una señal clara, entonces entro” o “Quiero sentirme 100% seguro antes de hacer mi próximo trade”. Lo escucho todo el tiempo, esa necesidad de esperar a que el mercado “pinte” el escenario perfecto para que tú solo tengas que dar clic y ganar.
Cuando empecé a correr mis primeras carreras, si me sigues sabes que soy aficionado al running, siempre quería que fuera un día soleado, sin viento, con la temperatura justa. Soñaba con condiciones ideales. Hasta que entendí que si quería mejorar como corredor, tenía que entrenar con frío, con calor, con lluvia, incluso con cansancio acumulado. Porque en la carrera real, nunca tienes el control total del clima ni del entorno.
Y lo mismo pasa en el trading.
Dos formas de enfrentar la tormenta
Hace poco, una persona muy especial para mí, me recomendó un video en YouTube, nada que ver con el trading, más bien era un tema espiritual, y aprovecho para agradecerle “públicamente” porque siempre me comparte contenidos que me dejan pensando y, de paso, me los deja de tarea. En ese video se hablaba de algo simple pero poderoso: en la vida tenemos dos opciones ante los retos:
- Pedir porque la tormenta se calme.
- Pedir calma en medio de la tormenta.
Eso me tocó bastante. Porque me recordó a muchos traders que se quedan atrapados esperando que el mercado sea ese mar tranquilo y predecible que nunca llega. Pero el mercado es como la vida: impredecible, cambiante, a veces violento y a veces sereno.
Si solo avanzas cuando todo luce “seguro”, te estás condenando a no avanzar nunca.
Imagina que un tenista profesional solo quisiera jugar cuando sabe que su rival va a fallar o que no está en las mejores condiciones para competir. ¿Qué pasaría? Nunca subiría de nivel.
O piensa en Rocky Balboa (sí, la clásica película, que a los mayores de … no lo voy a decir), pero si Rocky hubiera esperado a tener la certeza de ganar antes de subirse al ring, jamás habría peleado. Su crecimiento estuvo en aceptar la incertidumbre del combate. Y, si quieres llevarlo a un plano más cercano y realista, ¿qué hubiese pasado si nunca le hubieras hablado por temor a esa persona especial que ahora hace parte de tu vida?
Bueno, el mercado no está para darte comodidad. Está para ponerte a prueba.
El miedo como freno invisible
Estoy seguro que ahora estás pensando: “Vale John, pero ¿cómo me quito el miedo a equivocarme?”.
Déjame decirte que el miedo no se elimina con más análisis o más indicadores, es más, nunca se va a ir, debes aprender a manejarlo. Piensa ahora en tu entrenamiento en el gimnasio: no te vuelves fuerte mirando videos de sentadillas. La fuerza se construye enfrentando el peso, con dolor y con constancia.
En el trading, la fuerza mental se construye operando en condiciones que no siempre son las ideales, gestionando tu riesgo, aprendiendo a convivir con la incertidumbre.
El problema es que muchos se engañan pensando que si esperan lo suficiente, llegará ese momento perfecto donde el mercado confirmará todo y ya no habrá dudas. Eso no existe. Y mientras esperan, el tiempo pasa, los objetivos financieros se postergan y la frustración crece.
Te voy a ser terriblemente sincero: si no superas el miedo a los mercados, nunca vas a alcanzar la consistencia que tanto buscas. El miedo te convierte en espectador, no en protagonista. Y nadie llega a sus metas desde la tribuna.
Entrenarte para el mercado real
Lo que de verdad necesitas no es que el mercado te dé todas las señales. Lo que necesitas es entrenarte para enfrentarlo en las condiciones en que se presente.
Como empresario, aprendí que los mejores negocios no nacen en tiempos fáciles, sino en medio de crisis. Como corredor, entendí que si quería superar mis marcas, debía aprender a regular mi respiración en las subidas más duras. Como trader, confirmé que la clave no está en esperar la calma, sino en tener calma cuando todo parece tormenta.
Y esa calma no es magia. Es preparación. Es sistema. Es disciplina.
En mi mentoría trabajamos justamente en eso: no en venderte la idea de un mercado dócil que hará lo que tú quieres, sino en enseñarte a tener la mentalidad, las herramientas y la estrategia para operar con confianza.
Conclusión: tu momento es ahora
Si estás leyendo esto, es porque sientes que el trading puede ser el vehículo que te lleve a tus objetivos financieros y de vida. Y tienes razón: puede serlo. Pero solo si dejas de esperar las condiciones ideales y empiezas a entrenarte de verdad.
El miedo a equivocarte no va a desaparecer un día por arte de magia. Desaparece con acción, con práctica, con guía.
La pregunta no es si el trading funcionará para ti. La verdadera pregunta es: ¿estás dispuesto a entrenarte para que funcione?
Espero que este artículo te haya sido útil e interesante. Si quieres saber más sobre el mundo del trading y cómo puedo ayudarte a convertirte en un trader exitoso, te invito a unirte a mi blog, dejarme tus comentarios y a tomar mi mentoría personalizada. Estaré encantado de llevarte a ser rentable en el trading.
“Eres el proyecto más maravilloso en el que vas a trabajar nunca”, no dejes que el miedo te limite. 👍🏼