Haciendo seguimiento de mis estudiantes de mentoría en trading de los últimos meses, a fin de invitarlos al evento que tendremos en mi comunidad este fin de semana, recordé a uno muy especial, vamos a llamarlo Andrés. Cuando Andrés comenzó, su estrategia era simple: operar todo el tiempo. Entraba y salía del mercado constantemente, convencido de que cuantas más operaciones hiciera, más dinero ganaría.
Cada pequeña fluctuación del precio le parecía una oportunidad que debía aprovechar, y sin pensarlo mucho, abría una nueva operación. Pero en lugar de acumular beneficios, su cuenta disminuía rápidamente. Frustrado, se dio cuenta de que algo no estaba funcionando bien.
Después de analizar su operativa, entendió algo que muchos traders tardan bastante en comprender: operar menos puede generar más beneficios.
Parece contradictorio, porque la lógica nos dice que más operaciones deberían traducirse en más oportunidades de ganar dinero. Pero la realidad es otra. Si entiendes y aplicas esta idea, podrías transformar tu trading completamente.
El origen de la “sobreoperativa”
Cuando empiezas en el trading, lo más tentador es operar todo el tiempo. Cada pequeño movimiento del mercado parece una oportunidad imperdible, esto te lleva a pensar que si no entras estarás perdiendo dinero.
A mi parecer, esta mentalidad es el resultado de varios factores:
El miedo a perder oportunidades: Sientes que si no tomas una operación, estarás perdiendo dinero.
El exceso de confianza: Tras algunas operaciones positivas, crees que puedes anticipar cada movimiento del mercado.
La emoción: La adrenalina de entrar y salir constantemente de posiciones puede volverse una adicción.
Falta de un plan claro: Sin reglas definidas, cada movimiento del precio parece una señal de entrada o salida.
El problema es que operar más no significa ganar más. Por el contrario, puede ser la causa principal de tus pérdidas.
Las consecuencias de la “sobreoperativa”
La “sobreoperativa”, también conocida como “overtrading,” puede acabar tu cuenta de trading más rápido de lo podrías imaginarte. Estas son algunas de sus consecuencias:
1. Altos costos en comisiones y spreads
Cada operación tiene un costo. Ya sea una comisión fija o un spread, si operas constantemente, esos pequeños costos suman una cantidad considerable que afecta tus ganancias.
2. Fatiga mental y decisiones impulsivas
El trading requiere concentración y disciplina. Si pasas el día entero entrando y saliendo del mercado, tu mente se agotará y empezarás a tomar decisiones emocionales en lugar de racionales.
3. Mayor exposición al riesgo
Cuantas más operaciones hagas, más oportunidades hay de cometer errores y de exponerte a movimientos impredecibles del mercado.
4. Pérdida de enfoque en una estrategia consistente
El trading exitoso se basa en encontrar buenas oportunidades con alta probabilidad de éxito. Si operas demasiado, pierdes la capacidad de esperar pacientemente por esas oportunidades.
¿Cómo controlar el número de operaciones?
Ahora que entiendes por qué operar menos puede ser más beneficioso, la pregunta es: ¿cómo logras controlar tu número de operaciones y enfocarte solo en las mejores oportunidades?
1. Define reglas claras para operar
Crea un plan de trading con criterios específicos de entrada y salida. Solo deberías abrir una operación si todas las condiciones de tu estrategia se cumplen.
2. Usa un diario de trading
Llevar un registro de todas tus operaciones te ayudará a ver patrones en tu comportamiento y a identificar si estás operando demasiado. Anota cada entrada, salida, justificación y resultado.
3. Enfócate en calidad, no cantidad
En lugar de buscar muchas operaciones al día, busca las mejores “configuraciones” del mercado. Es preferible hacer una operación consistente con tu estrategia a diez que no tienes claro por qué las tomaste.
4. Establece límites diarios o semanales
Decide de antemano cuántas operaciones vas a hacer por día y por semana. Si alcanzas ese límite, cierra tu plataforma y evita la tentación de seguir operando.
5. Aprende a disfrutar del proceso, no solo de la acción
El trading no se trata solo de estar en constante movimiento. Valorar la espera, la paciencia y la disciplina te llevará mucho más lejos que la operativa impulsiva.
Conclusión
El mercado siempre estará ahí, pero tu capital no, si no lo cuidas. Operar menos para ganar más es una de las lecciones más valiosas que puedes aprender en el trading. La paciencia y la disciplina son las verdaderas claves del éxito. Si logras enfocarte en calidad sobre cantidad, no solo mejorarás tus resultados, sino que también reducirás el estrés y el desgaste emocional.
Espero que este artículo te haya sido útil e interesante. Si quieres saber más sobre el mundo del trading y cómo puedo ayudarte a convertirte en un trader exitoso, te invito a unirte a mi blog, dejarme tus comentarios y a tomar mi mentoría personalizada. Estaré encantado de llevarte a ser rentable en el trading.
¡No dejes que el miedo te limite! 👍🏼